CAMÍN REAL DE CASO, PRINCIPADO DE ASTURIAS, ENTRE BELERDA Y VENEROS/CAMPO DE CASO.
Un paseo muy agradable entre Belerda y Veneros/Campo de Caso
La
ruta del Camín Real atraviesa parte del concejo de Caso, en el Principado de
Asturias. Recorrerla es agradable y se convierte en una interesante lección de
Historia, sobre todo, si nos apoyamos en la lectura de los que saben.
Fueron varios los monarcas medievales que
protegieron al concejo con mercedes y concesiones. Juan Ignacio Ruiz de la Peña
nos habla de una donación de Alfonso VII para que se construyera en la villa de
Tarna un hospital o alberguería que pudiera ser utilizado por los transeúntes:
viajeros, comerciantes, aventureros, también peregrinos. El destinatario de la
donación tiene nombre: se trataba de Martín Díaz, de quien el profesor nos
cuenta que procedía de la zona de Bueres y que, años más tarde, recibiría otras
concesiones en Belerda.
La
construcción en el siglo XII de un hospital o albergue informa sobre la
existencia de un camino transitado. Sabemos que descendía por el puerto de
Tarna hasta Pendones, para llegar a las inmediaciones de Campo de Caso. Allí se
cruzaba el río por el puente de piedra existente a su entrada, que hoy
conocemos como puente romano, a partir de donde se bifurcaba el
itinerario: un ramal se dirigía a Villaviciosa y el otro seguía el curso del
río Nalón, en dirección al centro de Asturias.
El
primer itinerario fue muy importante en época medieval; se utilizó como ruta de
trashumancia estacional entre la marina de Villaviciosa y la montaña de Caso,
atravesando la collada de Arniciu, pasando por el concejo de Piloña y llegando
al concejo de Villaviciosa. Recordemos el Privilegio concedido por Juan II a
los casinos, en el siglo XV, muestra de que los ganaderos lo utilizaban de
forma habitual.
El
segundo itinerario continuaba paralelo al curso del río Nalón: pasaba por Tanes
y llegaba a Sobrescobio, donde se levantaba el Torrexon de los Aceales, hoy conocido como torreón de
Villamorey, construcción medieval que se considera una posible torre de
vigilancia y en cuyas cercanías fue fundada la Pola de Sobrescobio. El camino
continuaba por Llorío y Puente de Arco, Pola de Laviana, Ciaño y Langreo.
El
trayecto entre Belerda y los alrededores de Veneros se encuentra bien
conservado y no reviste ninguna dificultad. Sube ligeramente hasta el Xerru, donde una señal nos informa acerca de la existencia de fosos. La vista
desde este punto es espectacular pues domina los cuatro puntos cardinales, es una
atalaya perfecta para controlar los valles de Soto y el de Campo. El camino llega
hasta la piscifactoría de Veneros y desde allí, se puede salir a la carretera o
bien avanzar hasta Campo de Caso por la ribera del río.
Pasear por esta pequeña parte de nuestro Camín
Real es una agradable experiencia gracias a la contemplación del paisaje, la
recreación histórica, los sonidos de la naturaleza. Fue pisado durante cientos
de años por foráneos y naturales del lugar, peregrinos o campesinos, que
hicieron uso de él con prudencia y normalidad, los mismos valores que hoy
podemos seguir aplicando.
Bibliografía interesante: Historia de Asturias (Tomo 5) Editorial Ayalga, de Juan Ignacio Ruiz de la Peña. A la sombra del Tiatordos, de Guillermo Mañana.
Comentarios
Publicar un comentario