JOYA DE CALEAO Y TESORO DE LOS CASINOS (3)

 LAS TALLAS ROMÁNICAS DE LA IGLESIA DE LA SANTA CRUZ DE CALEAO

Imagen de La Dolorosa.

Las tallas románicas de la iglesia de la Santa Cruz de Caleao son dos obras de pequeño tamaño pero de gran valor artístico. Por sí mismas dotan a la iglesia de un gran valor y convierten a Caleao en un destino imprescindible para los aficionados e interesados en el románico rural asturiano. No conocemos el nombre de sus autores y tampoco la fecha exacta de su fabricación, aunque sí que fueron realizadas a lo largo del siglo XIII y que, por tanto, son anteriores a la fábrica original de la iglesia. Se trata de dos figuras: la Dolorosa y la Virgen de Ricao.

La Dolorosa es una escultura en bulto redondo con forma de figura orante y en posición erguida, ataviada con un manto y de pequeño tamaño. Fue confeccionada para ser colocada sobre una peana y estuvo durante un tiempo en la hornacina superior del ático del retablo del Carmen. En la actualidad está sobre una ménsula situada encima de la puerta de la sacristía. Condensa los rasgos generales de la escultura románica,  como son la aparente inexpresividad, el hieratismo y el tamaño reducido. También anuncia en el movimiento de los pliegues la presión de un estilo nuevo que se va anunciando, el gótico, que en otros lugares más comunicados ya estaba iniciando su esplendor.  Es una figura bellísima, capaz de transmitir gran expresividad a partir de la contención estilística propia del románico. Siendo párroco de la iglesia don José Luis Sánchez Díaz, la figura fue restaurada por el estudio de Jesús Puras en 2003 y hoy se puede ver policromada. 

Altar de la Virgen del Carmen, coronado con la imagen de la Virgen de Ricao.

  La imagen de la Virgen de Ricao es una talla de madera en bulto redondo, policromada, en la que se representa a la Virgen entronizada y ricamente ataviada, con el Niño en su regazo.  Se desconoce la fecha exacta de su fábrica, pero parece posterior a la Dolorosa pues es menos compacta y contiene mayor número de detalles y más elaborados: el trono en el que se sienta y sobre todo, el Niño, que porta en su mano izquierda las Sagradas Escrituras. La figura de la Virgen es una de las imágenes elegidas para ilustrar el capítulo de Caso en la Gran Enciclopedia Asturiana. Se trata de una fotografía tomada en el exterior del templo, en la que está sin corona, tal y como la podemos ver hoy en el templo. 

La Virgen de Ricao estuvo antiguamente colocada en el santuario del mismo nombre, en la carretera de la Felguerina. En el libreto editado por la Asociación de Amigos de la Santa Cruz, leemos que "frente a la ermita se alzaba una casa de novenas para alojar a los peregrinos que llegaban a Caleao por el camino de Tarna". La pequeña ermita fue asaltada hace unos años por unos saqueadores que se llevaron la campana y a partir de entonces, los vecinos decidieron que la imagen se trasladara a la iglesia de Caleao, donde permanece desde entonces todos los días del año salvo el ocho de septiembre, cuando se celebra el día de la Virgen en Asturias y los vecinos celebran la procesión y la "puya del ramu".

En la actualidad, la Virgen de Ricao se encuentra coronando el altar de la Virgen del Carmen. Este retablo es de estilo barroco tardío, de la segunda mitad del siglo XVIII, realizado con madera policromada y dorada. La Virgen del Carmen se encuentra en la hornacina rectangular situada encima del sagrario, es una pequeña figura de cuarenta centímetros cuyo estilo sigue la influencia del escultor Antonio de Borja.