LAS ROMERÍAS Y LOS RETOS EN EL CONCEJO DE CASO

 

   Los de Tanes son de oru

Los de Coballes, de plata

Los del puebliquín de Abantru

Son recortes de hojalata.

     Así comienza esta entrada, con unas estrofas que Oliva Armayor presenta como ejemplo de los "retos" entre los mozos, que en este caso eran de Tanes.

    San Juan en el Campu, San Pedro en Tarna, la Foz y Coballes, la Magdalena en Tanes, San Bartolo en Orlé, Santiago en Bueres, Santa Ana en Prieres... hay tantas fiestas patronales como pueblos casinos. Y un elemento fundamental de la fiesta fueron siempre las romerías, sobre las que podemos contar una pequeña historia.

     Las romerías celebradas con ocasión de las fiestas patronales llegaban a su punto álgido entre junio y septiembre, por evidentes razones climatológicas. Comenzaban a la caída de la tarde, cuando la faena de la herba estaba concluída. 

    Como en el pasado no disponían de medios de transporte, para desplazarse al pueblo en el que se celebraba la romería, los mozos y mozas salían en grupo. Llevaban puesto el calzado para caminar y, colgados de una mano, los zapatos para la fiesta. Al caer la noche, ya de regreso, las mozas se dejaban acompañar por sus “enamorados”, iniciándose en muchos casos unas relaciones que la mayoría de las veces terminarían en matrimonio, pues no estaba bien visto tener varios “acompañantes”.

"La romería", de Nicanor Piñole

    Además del cante y el baile, se desarrollaba otro fenómeno protagonizado por los mozos: los retos, para los que, si no existía un motivo aparente, se buscaba, pues todo valía con el fin de armar “gresca”, tal y como refleja Armando Palacio Valdés en La aldea perdida. Los mozos del pueblo en el que se celebraba la fiesta no cejaban hasta expulsar a los de un pueblo rival, que con frecuencia era limítrofe o muy cercano. Además de las cuartetas que aparecen al inicio de este texto, nos gustan mucho estas que Oliva Armayor cuenta que recitaban los de Caleao, cuyos mozo desafíaban a los de Coballes o a los de la Felguerina:

Tente firme, Merecueria,

Que la Roza ya cayó:

La Carbaza está temblando

Del susto que recibió

Desde luego, mucho cambiaron las costumbres y los rituales...